La estrategia independentista socialista como fuerza motriz de la lucha de clases en Euskal Herria

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LA ESTRATEGIA INDEPENDENTISTA

SOCIALISTA COMO FUERZA MOTRIZ DE LA

LUCHA DE CLASES

EN EUSKAL HERRIA

 

 

  1. 1 - DECLARACIÓN DE PRINCIPIOS
  2. 2 - LA RUPTURA DEMOCRÁTICA
  3. 3 - LÍNEA POLÍTICA DE EHK

                                   DECLARACIÓN DE PRINCIPIOS.

Los abertzales comunistas de Euskal Herriko Komunistak (EHK) asumimos como principio político estratégico la consigna: “Independentzia eta Sozialismoa”, en tanto que expresa de manera clara y concisa la forma histórica que la lucha de clases adopta en Euskal Herria.

Independencia y socialismo encierran dos objetivos: la consecución de un marco geo-político vasco sobe­rano y la realización del socialismo en dicho marco. La asunción del binomio de independencia y socialismo determina por tanto, una estrategia de emancipación nacional y de transformación social.

Siendo la contradicción fundamental la lucha de clases, en Euskal Herria se manifiesta y se configura en forma y contenido como un proceso de emancipación nacional de la clase trabajadora vasca y de los diferentes sectores populares hacia la creación de un Estado vasco socialista.

Dada la correlación de fuerzas en nuestro País así como la existente en el plano internacional, el logro de un Estado vasco no implica la consecución del socialismo. Dadas las condiciones políticas y sociales actuales, la vía hacia el socialismo sin un Estado propio, enfrentaría aún más dificultades dada la desproporcionalidad de las fuerzas en liza, no sólo políticas sino también militares.

 

                                    RUPTURA DEMOCRÁTICA

Euskal Herriko Komunistak (EHK), define la actual etapa como una fase de Ruptura Democrática centrada en la acumulación de fuerzas, que prepara las bases para el asalto hacia la independencia y el socialismo.

La resistencia practicada por el conjunto del Movimiento de Liberación Nacional Vasco (MLNV) durante las últimas cinco décadas, aunque no ha logrado romper el marco establecido por medio de la negociación política, si ha significado, no sólo la consolidación del Movimiento en sí mismo, sino que ha conseguido asentar y socializar entre importantes sectores populares y fracciones muy significativas de la clase trabajadora vasca, prácticas de organización popular, planteamientos políticos avanzados de democracia y una conciencia colectiva identitaria y de clase.

La estructuración de un tejido social fuerte y la conciencia colectiva de pertenencia a un pueblo que lucha tiene a su principal valedor en la Izquierda Abertzale.

Los aparatos represivos, jurídicos e ideológicos de los estados español y francés han tratado e intentan aplastar, con la colaboración de elementos regionalistas vascongados y navarros a la Izquierda Abertzale, único espacio político-social capaz de gestar las condiciones para la formación de un Bloque de fuerzas progresistas determinante y hegemónica que afronte un proceso de ruptura con el actual modelo de sistema, negador de derechos individuales y colectivos.

La formación del Bloque de fuerzas progresistas que camina hacia la Ruptura Democrática y por el que apostamos los abertzales comunistas, debe construirse en base al Pueblo Trabajador Vasco y los sectores populares, como sujetos de clase conscientes y únicos capaces de liderar la lucha por la soberanía política y económica y los únicos dispuestos a acometer una transformación radical del sistema hacia el socialismo.

Sabemos de los cambios que ha sufrido la clase obrera, su fraccionamiento y el debilitamiento de su conciencia y en esa medida, cómo su condición de sujeto revolucionario ha ido difuminándose en estas últimas décadas de estado de bienestar, reformas y contrarrevolución. También se han visto afectados los sectores populares y eso se ha reflejado en la lucha popular.

A corto plazo será difícil una deslegitimación del sistema. La clase trabajadora y los sectores populares mantenienen en la actualidad su lucha y reivindicaciones en los márgenes de las medidas reformistas que intentan evitar el retroceso de sus condiciones materiales actuales forzada por la crisis capitalis La lucha comunista no debe acabar ahí, puesto que la presión en el marco institucional conseguirá mejoras no transformaciones y lo que reivindicamos es el cambio definitivo de la sociedad conforme a nuestro modelo: "Independencia y Socialismo para Euskal Herria"

 

                         LÍNEAS DE INTERVENCIÓN POLÍTICAS DE EHK

El trabajo político táctico que los abertzales comunistas debemos desarrollar se estructura en torno a tres ejes:

  • Territorialidad y Autodeterminación
  • Amnistia
  • Lucha por la transformación social y la reconstrucción ideológica, política y organizativa de la clase trabajadora vasca y los sectores populares.

     

              Respecto a la territorialidad y la Autodeterminación

  1. La acción soberanista vasca parte de dos elementos fundamentales que dan forma y legitimidad al proceso independentista: la territorialidad y el derecho de autodeterminación.

En primer lugar, la soberanía ligada a la recuperación de una territorialidad desarticulada por dos estados opresores, el español y el francés y que es el marco geográfico de actuación de los abertzales comunistas.

En segundo lugar, la soberanía surgida de una voluntad popular que se expresa por medio de la autodeterminación que garantice el desarrollo de una libertad nacional negada por el imperialismo hispano francés.

El instrumento sociopolítico más adecuado para alcanzar el derecho de autodeterminación es la Izquierda Abertzale de la que los comunistas vascos debemos ser parte esencial, profundizando de manera prioritaria, el concepto de soberanía ligado a una voluntad popular comprometida con un proyecto de país en clave democrática y socialista.

La independencia vasca sigue siendo concebida desde amplios grupos sociales de Euskal Herria (también de sectores de la clase trabajadora), como un proyecto de nacionalistas. La experiencia vasca al socialismo tendrá éxito y culminará si la clase trabajadora se pone al frente del proceso y se quiebra la división, fusionando definitivamente a las capas obreras vascas que hasta ahora han estado bajo la manipulación españolista o regionalista de la burguesía, en un proyecto de independentista y de emancipación social.

La fuerza y presión del Pueblo Trabajador Vasco es la única opción para arrastrar a la pequeña burguesía y colocarla en clave rupturista además de bloquear a la clase dominante (tanto francesa como española) y regionalista.

En este sentido, la Izquierda Abertzale no ha logrado implicar en la lucha a distintos sectores sociales que sufren un importante grado de explotación laboral, optan por integrar el Bloque de fuerzas estatalistas. La necesaria búsqueda de la hegemonía política y social tiene que sumar al proceso emancipatorio a sectores de la clase trabajadora no abertzale. Todos ellos no han sido considerados desde la Izquierda Abertzale como grupos con intereses politico-económicos heterogéneos respecto a la oligarquía, limitándose la Izquierda Abertzale a interpelarlos como abertzales más o menos radicales y no como sectores enemigos de los intereses del Gran Capital y, por tanto, de la política que promueve la Unión Europea.

 

Respecto a la amnistia

Euskal Herriko Komunistak luchará por la amnistia sin renunciar a las mejoras que se puedan conquistar en las condiciones de vida de los prisioneros vascos.

Asumir la amnistia como reivindicación, significa reconocer que las causas y motivos por las que hubo y hay actualmente presos políticos no han sido solucionadas. La consecución de la amnistia implica por tanto una resolución de las cuestiones políticas pendientes en esta fase de Ruptura Democrática.

 

Respecto a la lucha social

El fortalecimiento del Bloque de fuerzas abertzales y progresistas, deberá generar conciencia nacional y de clase lo que necesariamente hará aproximarse a nuestro país a los límites de la legalidad burguesa y por tanto a una radicalización de la dinámica de la lucha si se pone en práctica políticas económicas y sociales en clave progresista, -ni tan siquiera socialista- encontrando en las fracciones transnacionales de las clases capitalistas su enemigo mortal. Fracciones transnacionales del capitalismo y sus apéndices políticos, que controlan y gestionan los Aparatos del Estado incluyendo resortes de la autonomía vasca y navarra.

De manera simultánea los abertzales comunistas debemos reforzarnos ideológica, política y organizativamente. Para ello hay que fomentar la lucha por los espacios y conquistar nuestro derecho a configurarnos dentro de la Izquierda Abertzale como una organización reconocida. Debemos a su vez combatir el comunismo españolista y jacobino francés que intenta desarrollarse en Euskal Herria bajo el paragüas de las políticas de los estados opresores y que sirven para canalizar la rebeldia hacia parámetros controlables por el sistema e impedir el avance de la emancipación.

El nivel de desarrollo político y organizativo de los abertzales comunistas determinará en gran medida, las condiciones y la forma política y económica que asuma la Ruptura Democrática, tanto en el interior de la Izquierda Abertzale como en el conjunto del País, dotándola de un mayor grado de capacitación para afrontar la lucha por el Socialismo.

La transición hacia el Socialismo, con unas organizaciones revolucionarias de clase poderosas integradas en la Izquierda Abertzale y en el Movimiento obrero y popular, se verá facilitada de manera extraordinaria.

Somos conscientes de que un proceso de estas características se produce con sucesivas rupturas que marcan nuevas etapas en función de nuevas correlaciones de fuerzas. La dialéctica, que solo puede originarse en el movimiento revolucionario, es un camino continuo, con tropiezos y saltos, pero constante hacia la meta final. Y en ese camino, la lucha ideológica acompañada de una eficaz organización, se torna fundamental puesto que deberá abrir nuevos espacios y perspectivas novedosas en el interior de las fuerzas progresistas en general y en la Izquierda Abertzale en particular.

 

                EHK Euskal Herriko Komunistak